TE VEO, TE SIENTO, SÉ QUE ESTÁS AHÍ

Russ Njust es un poeta y una alma gentil que vive en Dinamarca. Estos son algunos pensamientos sobre las Llamas Gemelas, las Almas Afines, etc. He aquí lo que me envió. 



“Para mí, la relación de las Llamas Gemelas a veces se siente como un enigma. Para el corazón es muy simple, inocente y directa, y para la mente sigue siendo un misterio sin resolver. Hay un profundo reconocimiento y un amor que no se puede negar, que también te hace reaccionar en grande. Según cuentan, todos estamos conectados en el corazón de Dios, si lo prefieren… la humanidad ES el corazón de Dios y cada alma individual tiene una carga masculina y una femenina. En el momento de la separación y el descenso a la 3D, se supone que encarnamos en cuerpos y vivimos vidas individuales para aprender, bueno, tal vez para aprender lo que no es el amor. Así que cada vez que nos hieren, le rezamos al amor para que nos lleve a casa. Finalmente el juego nos deja exhaustos y terminamos manteniéndonos al margen, pensando que tiene que haber algo más que esto. Por favor, Señor, que haya algo más que esto. Y de repente, allí está ella. Tal vez no se parezca a lo que imaginabas, pero TU CORAZÓN la conoce. Cualquiera sean las pruebas, las heridas o los miedos que se interpongan, sientes que Dios te está mirando a través de sus ojos. Y sus ojos se vuelven un portal hacia el alma de Dios. Cuando terminas, te encuentras de pronto mirando una imagen perfectamente espejada de tus reacciones. Es difícil de explicar. He conocido a muchas mujeres, pero este tipo de relación es distinto. He oído que podemos atraer atributos de nuestro gemelo a través de cualquier persona, cuando estamos listos. Sea como sea, se supone que tenemos sólo una Llama Gemela, un tercio de la Trinidad...” 

él se pregunta cómo decirle lo que siente internamente 
ella susurra, mi amor, lo supe siempre 
él patea la tierra bajo sus pies 
una única lágrima cae a tierra 
y un millón de sueños se convierten en barro, confundidos y mudos 
escúchame, amor, suspira ella en su oído 
Yo siempre estoy aquí a tu lado… 
él aspira, tratando de abarcarla entera 
ella merece más que esto, gime él 
ven conmigo hacia verdes y hermosas praderas 
recoge flores silvestres y ponlas suavemente en mi cabello 
contempla el brillo del sol en mis ojos mientras corremos libres y locos 
vadea conmigo arroyos en los bosques y duerme... 
duerme profundamente en mis brazos sobre lechos de musgo 
él despierta... la cara de ella está roja con el calor de su fusión 
él se pregunta cómo podrá contarle alguna vez lo que siente internamente 
ella susurra, mi amor, lo supe siempre. 

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